Llega a los cines El contable 2. Ben Affleck y el director Gavin O’Connor regresan al icónico personaje de Christian Wolff, el contador con autismo de alto funcionamiento que enamoró al público del cine de acción en la primera entrega de 2016. Han pasado casi 10 años, pero al fin su historia tiene continuación. Un proyecto que promete ser aún más explosivo y en el que Jon Bernthal asume el coprotagonismo como Brax, el hermano de Christian que en la cinta original ejercía de antagonista secundario.
La historia de El contable 2 sigue a Christian Wolff, un hombre con un talento particular para resolver problemas complejos. Cuando un viejo conocido es asesinado, dejando un mensaje críptico que dice «encontrar al contable», Wolff se ve obligado a esclarecer el caso. Para ello, reconoce que es necesario poner en marcha medidas más extremas y que necesita ayuda. Así que recurre a su hermano Brax, con el que no tiene ningún contacto y que es muy peligroso. En colaboración con la subdirectora del Tesoro de EE.UU., Marybeth Medina, descubren una conspiración letal y se convierten en el blanco de una despiadada red de asesinos que no se detendrán ante nada para mantener sus secretos ocultos.
El contable 2
La secuela de Ben Affleck incorpora a Jon Bernthal como un personaje tan protagonista como él. De esta forma, El contable 2 crece al explorar la dinámica de hermanos, dando paso a mucho mayor ritmo y diversión en detrimento del drama y la sobriedad de la primera entrega. Además, el nivel de la acción también es mejor. Y aunque su guion es algo disperso, resulta una cinta tan o más sólida que la original.
Dinámica de hermanos
El mejor añadido de El contable 2 es Jon Bernthal. O, mejor dicho, la dinámica que se crea entre Ben Affleck y él. Los hermanos Wolff dotan al proyecto de muchísimo más interés y dinamismo que su primera entrega. Aquella funcionaba como un reloj gracias a la novedad de ver a un personaje tan particular como Christian jugar siempre un paso por delante mientras unía las piezas del intrincado puzzle.
Pero esa fórmula no podía repetirse sin más. Por eso, había que buscar un nuevo aporte. Tener a Brax como contrapunto de Christian es la decisión perfecta. La relación entre ellos se convierte en el verdadero alma de El contable 2. Mucho más que el caso que tratan de resolver, lo realmente interesante y embaucador del filme es ver cómo se comportan entre ellos.
Esto le da muchísimo aire a una película que podría haberse convertido en algo demasiado pesado y convencional. La química entre los dos actores es impresionante. Se divierten y hacen que la cinta crezca muchísimo cada vez que comparten una escena juntos. Ya sea con momentos tensos, escenas de pura acción o con secuencias absurdamente divertidas, la suma de ambos es el pilar que lo mueve todo. El contable 2 es prácticamente una hilarante buddy movie. Como ejemplo, un momento en un bar que se convierte en lo mejor del filme. Imposible no reír a carcajadas.
Una historia típica
Más allá de la dinámica entre Affleck y Bernthal, El contable 2 no se distancia demasiado de cualquier thriller de acción estándar. La investigación y el caso son algo tediosos y cuentan con bastantes altibajos por culpa de un guion flojo que quiere aparentar más complejidad de la que tiene. Por momentos la película se vuelve difusa, dando o restando importancia a ciertos elementos y descubrimientos sin que haya ningún motivo ni lógica.
Los espectadores pasarán alguna dificultad puntual para armar el acertijo por su irregular planteamiento. Con todo el esfuerzo que se ha puesto en el resto de ingredientes, es llamativa la falta de coherencia y cohesión de su historia. Por suerte, no es un fallo desastroso. A pesar de que los problemas se hacen muy evidentes, la visión general no queda irremediablemente empañada. La idea que se busca transmitir, la gran historia general, quedan claras. Sobre todo porque, además de las escenas entre Bernthal y Affleck, la acción también le hace ganar muchos enteros.
Más acción, más diversión
Y es que la otra gran clave para que El contable 2 sobrepase a su predecesora es su apuesta por un aumento en la acción. No solo el ritmo es mucho más elevado en su narrativa. También redobla sus esfuerzos con enormes set pieces llenos de disparos, puñetazos, sangre y explosiones. Cada vez que el filme corre el riesgo de estancarse por llevar demasiadas escenas seguidas de diálogos estáticos y miradas intensas, llega el alivio en forma de frenesí y dosis extra de adrenalina.
No es que el filme cuente con secuencias particularmente memorables. Pero están lo suficientemente bien hechas como para entretener. La factura técnica de la película es bastante alta y se nota en cada uno de estos instantes. Y aquí, donde cabría esperar que Bernthal ganase aún más puntos por su dilatada experiencia y su talento innato para las escenas de tiros, Affleck consigue mantenerle el pulso y hacer que este binomio se crezca todavía más.
En definitiva, El contable 2 es tan buena o mejor película que la primera. De nuevo, y pese a los años que han pasado, queda claro que el personaje de Christian Wolff es de los más interesantes que ha dado el cine de acción en los últimos tiempos. Affleck y Bernthal están brillantes como hermanos, con este último devorando la pantalla a cada escena. A pesar de su guion irregular y disperso, la cinta cumplirá de sobra con las expectativas de los fans.