De momento solo hemos visto una fumata saliendo de la chimenea de la Capilla Sixtina y ha sido, como suele ocurrir con la primera, una fumata negra. Hay quien dice que hoy tendremos ya la fumata blanca. No se puede saber con seguridad. Mientras tanto, las apuestas sobre cuál será el cardenal que se alzará como papa tras este cónclave siguen echando fuego. Se ha hablado mucho de ellos, especialmente sobre su posición en uno u otro tema. A mí, personalmente, me interesan las cuestiones científicas, por lo que he hecho una búsqueda sobre la opinión de algunos de los cardenales favoritos en este tema. Sobre todo se sabe qué opinan sobre el cambio climático, aunque algunos se han adentrado a dar su punto de vista en otras áreas.
De hecho, uno de los que más han hablado sobre ciencia es el favorito de las encuestas, el italiano Pietro Parolin. Como otros muchos, ha defendido las acciones contra el cambio climático; pero, además, se ha adentrado en otras cuestiones, apoyando el trabajo de los científicos y su contribución al desarrollo humano.
Por lo general, los cardenales más conservadores son los que muestran menos simpatía por la ciencia o, directamente, evitan hablar sobre ella. Aunque hay algunas excepciones, desde luego. Hay de todo en este cónclave, por lo que lo mejor será que lo veamos con algunos ejemplos.
Pietro Parolin, el favorito del cónclave
El cardenal italiano Pietro Parolin es algo más conservador que el Papa Franciso, pero sí que comparte parte de su visión liberal con ciertos temas de la Iglesia. Forma parte del grupo de cardenales que han manifestado abiertamente su opinión sobre el cambio climático y su defensa de las acciones empleadas para combatirlo.
En su caso, además, ha hecho mucho hincapié en que los seres humanos debemos ser conscientes de nuestra responsabilidad en lo que está ocurriendo con el planeta y actuar cuanto antes si no queremos perderlo tal y como lo conocemos. A todo esto se suma que en 2019 impartió la conferencia inaugural del Foro Abierto EuroCiencia (ESOF) de Trieste. Allí, instó a los investigadores públicos y privados a seguir trabajando bajo la guía de la fe. No podemos olvidarnos de que es un eclesiástico y, como tal, es lógico que incluya la religión en sus discursos. Aun así, es digno de atención que se haya llegado a rodear de científicos hasta ese punto. Sin duda, si saliese Papa no sería uno de esos que atacan continuamente a la ciencia.
Luis Antonio Tagle, el Francisco Asiático
El cardenal filipino es conocido de tal forma porque muchas de sus posturas se asemejan a las del fallecido Papa Francisco. En lo que a ciencia se refiere, es un firme defensor de las acciones climáticas. Sobre todo se ha afanado en divulgar sobre los problemas del impacto desproporcionado de las tormentas reforzadas pro el cambio climático en las comunidades pobres. Ha respaldado en todo momento la acción climática internacional y, de hecho, lo demostró con creces cuando fue presidente de Cáritas Internacional, al retirar la inversión de la organización en combustibles fósiles.
Con respecto a otras ramas de la ciencia, en algunas entrevistas ha reconocido que antes de estudiar teología quería ser médico. Esto podría indicar que es favorable a los avances de la ciencia y la salud. En parte puede que lo sea, pero sí que es cierto que se opuso al Proyecto de Ley de Salud Reproductiva de Filipinas con el que se planeó repartir a la población anticonceptivos gratuitos e información sobre planificación familiar. Por supuesto, también se opone al aborto, por considerar que el embrión es un ser humano desde el primer momento. Esto sí que se aleja de la ciencia; pero, al menos, parece que con el cambio climático sí que apoya el camino correcto.
Peter Turkson, ¿el primer Papa negro?
Hay varios cardenales negros, pero muchas personas defienden que Peter Turkson, de Ghana, podría ser el primer papa de color de la historia.
Es un candidato bastante liberal, que ha mostrado su apoyo a la ciencia a muchos niveles. Por un lado, fue uno de los redactores del Laudato Si, la encíclica propuesta por el Papa Francisco para cuidar el entorno natural. También ha dado numerosas conferencias sobre concienciación ambiental, con participación en reuniones tan importantes como la COP21 o el Foro Económico de Davos. Y, por si esto fuese poco, es canciller de la Academia Pontificia de Ciencias.
Malcolm Ranjith, activista climático, pero un poco conspiranoico
Ranjith forma parte de los cardenales del cónclave que defienden las acciones climáticas. Sobre todo, ha mostrado un gran activismo en contra de la contaminación, a la que bautizó como el peor cáncer de la humanidad. Además, el cardenal birmano demandó al propietario de un barco por liberar vertidos tóxicos e instó al gobierno de Sri Lanka, donde vive, a usar más energías renovables y luchar contra la deforestación.
En otras áreas de la ciencia se decanta un poco más por la conspiración. Por ejemplo, es un férreo defensor de la hipótesis de que el virus de la COVID-19 fue creado deliberadamente en un laboratorio. Ese por es emotivo por lo que, en su día, solicitó una investigación a las Naciones Unidas para que tomasen medidas contra aquel que lo hubiese hecho.
Robert Sarah, un Papa negro mucho más conservador
De todos los cardenales negros del cónclave, Peter Turkson y Robert Sarah son los favoritos para ser nombrados como Papa. Sin embargo, sus posturas son opuestas en muchísimos sentidos. Mientras que el primero se considera bastante liberal, el guineano Robert Sarah es radicalmente diferente. Cuenta con una posición mucho más conservadora, que en la ciencia se centra, sobre todo, en su oposición a la educación sexual y el aborto. Ha mostrado un gran activismo en contra de ambas cuestiones, igual que contra la que en todo momento define como “ideología de género”.
En cuanto a su posición sobre el cambio climático, en su momento firmó el Laudato Si, pero haciendo hincapié en que la Iglesia no debería dar prioridad a cuestiones sociales como esa ni permitir que su implicación gire en torno a ellas.
Peter Erdő, otro de los más radicales del cónclave
El húngaro Peter Erdő es uno de los cardenales favoritos de los grupos conservadores. No ha hecho apenas declaraciones referentes a la ciencia. Ni siquiera al cambio climático. Sin embargo, tiene un gran vínculo con el primer ministro húngaro Víktor Orbán, quien sí que ha mostrado un gran activismo climático.
En definitiva, hay todo tipo de posturas científicas en este cónclave. Puede parecer algo sin importancia, pero sin ciencia no somos nada. La postura del nuevo papa sobre este tema es mucho más importante de lo que parece.