Wicked sorprendió a la crítica especializada y al público, al adaptar con éxito el querido musical de Broadway. Pero más que eso, la producción logró captar todo el espíritu de un espectáculo conocido por su emocionante trama y su estupenda puesta en escena. De las canciones, a las actuaciones del elenco, a la forma de profundizar en el mágico reino de Oz. Lo cierto es que la película mostró una nueva dimensión de un espectáculo icónico. 

Pero a pesar de su fidelidad, la cinta de Jon M. Chu debió hacer algunos cambios al argumento original. Lo que le permitió, mezclar datos, escenarios y giros del libro Wicked (1985) de Gregory Maguire, además de un contexto mucho más completo y detallado acerca de sus personajes. De la vida de Elphaba (Cynthia Erivo), los padres de Glinda (Ariana Grande), pasando por una perspectiva minuciosa del territorio de leyenda imaginado por L. Frank Baum. La película mostró su capacidad para brindar una renovada vitalidad y profundidad a la querida obra de teatro. 

Por lo que, aunque Wicked es muy fiel a la producción, hay una serie de elementos que las diferencian entre sí. Para demostrarlo, te dejamos diez cosas distintas entre la cinta y el musical de Broadway. Lo que abarca desde la forma de presentar a sus personajes, hasta las decisiones creativas que el equipo de producción tomó para dar vida al mundo de Oz. Una selección para los fanáticos acérrimos de la icónica obra, ahora transformada en éxito de la pantalla grande.

La niñez de Elphaba

Para el argumento cinematográfico de Wicked, el pasado de sus personajes tiene una especial importancia. Por lo que le dedica mucho más tiempo e interés que su versión sobre las tablas. De hecho, el guion de Winnie Holzman y Stephen Schwartz, muestra con cuidado la niñez de Elphaba. Lo que incluye, cómo era su vida a los diez años y su relación con los animales parlantes de Oz. Lo que, después, sería un punto determinante en lo que viviría en la universidad de Shiz.

Al contrario, la obra de teatro apenas muestra una escena en que se ve a Elphaba como un bebé. Y además, de un breve parlamento cuando el personaje es ya una adulta, no hay muchos indicios de cómo fueron los años formativos de la bruja de piel color verde. Lo que hace un poco más complicado, comprender su comportamiento años después.

La aparición de la icónica Dorothy

Si bien en la obra de teatro puede verse la silueta de Dorothy arrojando agua a Elphaba — y en el proceso, destruyéndola—, el personaje no aparece con rostro o identidad. Algo que la cinta cambia de manera sutil, con un pequeño guiño que deja claro que, para la segunda parte, es probable que la icónica niña que encarnó Judy Garland, tenga una participación más amplia.

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