Eras cuestión de tiempo tras filtrarse el vídeo de uno de los epicentros de su acusación de acoso sexual: Gérard Depardieu ha sido condenado a 18 meses de cárcel por un tribunal de París después de que varias mujeres le acusasen de tocamientos y abusos durante el rodaje de la película Les volets verts de 2021.

Y esto no viene de ahora. El actor lleva tiempo en el ojo del huracán en lo que abusos sexuales se refiere. En total, más de una decena de actrices y compañeras de rodaje le han ido acusando constantemente de agresiones sexuales de diversa índole, aunque muchas de dichas acusaciones han ido prescribiendo y, por tanto, quedando fuera del reproche judicial. El vídeo, y las declaraciones de las víctimas, no obstante, he terminado con la condena del actor.

El citado vídeo contenía frases muy subidas de todo, como por ejemplo, «A las mujeres les encanta montar a caballo. Sus clítoris rozan la silla. Disfrutan mucho. Son unas zorras». “Tengo una viga en los pantalones”, incluyendo algunas palabras de carácter sexual hacia una niña de unos 10 años.

Gérard Depardieu será inscrito en el registro de agresores sexuales

No obstante, la condena de Gérard Depardieu tiene más que ver con las acusaciones de una compañera, que contó en el proceso judicial que el actor la había inmovilizado mientras le tocaba los pechos. Además de decirle frases como «Ven a tocar mi gran sombrilla, te la voy a meter por el coño«. Otra de las mujeres que le acusó, ayudante de dirección, contó que el actor le tocó el culo y los pechos en varias ocasiones en el set de rodaje.

Además de la condena de prisión, de 18 meses, a la que es probable que el actor no entre por ver conmutada la pena por otro tipo de condena, Gérard Depardieu será inscrito en el registro de agresores sexuales y además se verá privado de sus derechos civiles durante un período de dos años.

Se trata de un antes y un después dentro del movimiento MeToo de Francia, que además no solo puede terminar para siempre con la carrera de Gérard Depardieu, también puede servir como catalizador para que otras víctimas alcen la voz ante las agresiones sexuales que sufren tras las cámaras.

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