¿Te imaginas llevar un bolso de piel de dinosaurio? Después de que una empresa de biotecnología diga que ha resucitado al lobo huargo de Juego de Tronos y otra asegure que sabe cocinar albóndigas de mamut, ya nada debería sorprendernos. Pero sí, la cuestión es que al final hay cosas que nos sorprenden.
Desde que comenzó el auge de la carne cultivada en el laboratorio para evitar la crueldad animal, varias empresas han querido hacer lo propio con el cuero. Es una buena idea, sin duda. Pero lo que no nos esperábamos es que otra optase por fabricar piel de dinosaurio a base de colágeno fosilizado. Concretamente, piel de Tyrannosaurus rex.
La compañía que ha llevado a cabo esta sorprendente iniciativa es la británica Lab-Grown Leather Ltd, cuyo papel es justo la fabricación de este cuero cultivado en el laboratorio. Para lograrlo, se han unido a otras dos empresas, una de márketing digital, llamada VML, y otra, llamada The Organoid Company, especializada en el desarrollo de órganos artificiales. La sinergia de todas ellas ha llevado al desarrollo de una prueba de concepto. Esto quiere decir que, como tal, aún no existen los bolsos de piel de dinosaurio. Pero las tres compañías están muy seguras de que su método está listo para fabricarlos. De hecho, si te interesa, te puedes inscribir en su página para ser una de las primeras personas en recibir estos complementos únicos. No han dicho el precio y vaticinamos que no será barato, pero seguro que no les faltan compradores.
Colágeno fosilizado para obtener piel de dinosaurio
El colágeno es una proteína estructural que forma parte del tejido conectivo de la piel, los huesos, los músculos y las articulaciones.
Esto se relaciona con el cuerpo, porque dicho material se obtiene por una transformación del colágeno cuando la piel se somete a un proceso de curtido. Por lo tanto, podría decirse que el cuero es colágeno modificado. Para obtener cuero libre de crueldad animal se necesita sintetizar el colágeno en un laboratorio. Y eso es justamente lo que hacen estos científicos con otros animales y pretenden hacer también con la piel de dinosaurio.
Se basan en el análisis que ya han realizado de muestras de colágeno extraídas de fósiles de Tyrannosaurus rex. Las proteínas están compuestas por aminoácidos, cuya conformación se traduce a partir de secuencias de ARN, transcritas del ADN del ser vivo en cuestión. Lo que han hecho estos científicos, según explican en sus respectivas webs, es caminar hacia atrás hasta obtener la secuencia de ADN que se corresponde con el colágeno de Tyrannosaurus rex. Después, han utilizado células de animales emparentados con el dinosaurio para cultivar en el laboratorio dicha proteína. Se necesitan células con la maquinaria necesaria para sintetizar proteínas. No puede hacerse de la nada. A falta de células suficientes de dinosaurio, buenos son sus parientes.
Cabe destacar que no hay crueldad animal, pues basta con una pequeña biopsia para cultivar muchas otras células. No es necesario sacrificar a ningún ejemplar.
La diferencia entre esta piel de dinosaurio y otros órganos artificiales es que no se necesita un andamio. Normalmente, para crear órganos se necesita una especie de andamio de biogel sobre el que crecen las células cultivadas en el laboratorio. En este caso, en cambio, se las deja proliferar según sus propias instrucciones, por lo que se obtendría una piel de dinosaurio aún más realista.


¿Y ahora qué?
Estos científicos no han publicado estudios sobre sus hallazgos, por lo que solo sabemos lo que ellos han contado. Supuestamente los complementos de piel de dinosaurio estarán listos para finales de este año si todo va bien. No obstante, debemos tomar esta noticia con cautela. Hasta que no lo veamos y no demuestren científicamente lo que han hecho, no podemos dar nada por seguro.
Ahora bien, si lo hacen, podemos estar contentos de que se desarrolle un cuero artificial, libre de crueldad animal, que además no contiene materiales contaminantes, como el petróleo. Serían todo ventajas hasta cierto punto. ¿Pero de verdad era necesario usar piel de dinosaurio, habiendo tantos animales actuales cuya piel se puede cultivar? Parece que nos estamos obsesionando un poco con traer de vuelta a especies con las que nunca convivimos. La cuestión es que hay otras formas mucho más enriquecedoras de demostrar hasta dónde puede llegar la ciencia. En opinión de la que escribe, eso no hacía ninguna falta.