La semana de Xiaomi se presenta interesante. La compañía tiene previsto realizar un evento el próximo jueves 22 de mayo para anunciar varios productos estrella. Uno de los más importantes, y el núcleo en torno al que giran el resto de dispositivos, es algo que la firma china lleva un tiempo preparando. Hablamos de XRING O1, su propio chip. Nada de coprocesadores para mejorar la fotografía o chips que realzan ciertos aspectos: Xiaomi va directa a por Qualcomm y MediaTek.
De hecho, este procesador es noticia por culpa de un reciente benchmark filtrado. No solo se ha dejado ver para confirmar que cuenta con 10 núcleos capaces de alcanzar los 3,9 GHz o que tiene una GPU Mali-G925: el XRING O1 ha marcado una puntuación en Geekbench que asusta.
El procesador propio de Xiaomi ha conseguido 2.413 puntos en la prueba single core y 8.068 en multicore. Son cifras que se pueden considerar como buenísimas, pues sitúan este XRING O1 por encima de procesadores tan icónicos como el Qualcomm Snapdragon 8 Gen 3, un chip que el año pasado era la referencia del sector.
Que Xiaomi, una compañía sin apenas experiencia en el desarrollo y fabricación de procesadores, consiga estas cifras es, sin duda alguna, una muy buena noticia para su propio catálogo y los usuarios. A la dupla de Qualcomm y MediaTek se sumaría otra opción más, aunque esta estaría limitada solo ciertos móviles de la firma china.


¿A qué móviles llegará el XRING O1?
Bueno, Xiaomi no solo tiene pensado presentar su procesador propio el próximo jueves: también quiere hacer lo propio con los Xiaomi 15S y Xiaomi 15S Pro, dos variantes de los móviles anunciados para el mercado global hace unos meses. ¿Qué tendrían de especial estos dispositivos firmados con ls ‘S’? Blanco y en botella.
Todo apunta a que Xiaomi pretende lanzar estas dos versiones con el procesador XRING O1 en el interior, para así demostrar con dispositivos reales de lo que es capaz. Por supuesto, es muy poco probable que los Xiaomi 15S y 15S Pro lleguen a Europa: los primeros móviles con este procesador propio serían exclusivos para China.
¿Por qué este movimiento por parte de Xiaomi?
Es importante dejar claro que Xiaomi, al menos por ahora, no quiere dejar de utilizar procesadores de Qualcomm o MediaTek. La compañía está probando nuevas formas de rentabilizar su ecosistema, y al igual que en su día hicieron Samsung con Exynos o Huawei con Kirin, Xiaomi también quiere tener sus propios procesadores.
El objetivo principal es una incógnita por ahora, pero es de fácil pensar que el apartado económico es un factor primordial. Es bien sabido que Qualcomm se lleva un buen trozo del coste de los móviles que integran sus chips, siendo uno de los componentes más caros de casi cualquier smartphone.


Un procesador propio podría permitirle a Xiaomi lanzar dispositivos más económicos, aunque también tendría en la mano la opción de mantener los precios y aumentar su margen de beneficio. De hecho, hay tres teorías sobre la mesa.
- Xiaomi podría rebajar el coste de sus móviles con procesador propio gracias al ahorro respecto a Qualcomm o MediaTek.
- Como decimos, también cabe la posibilidad de que Xiaomi se quede ese ahorro para sí misma. Es bien sabido que los márgenes de la compañía son casi nulos en algunos dispositivos, por lo que tener más margen le permitiría mantener los precios a largo plazo sin las subidas que hemos visto en el resto de fabricantes.
- Por último, es posible que Xiaomi mantenga los precios, pero que ese margen esté destinado a mejorar otros aspectos de sus dispositivos. Un procesador mucho más barato se podría traducir en móviles con cámaras más avanzadas o mejores pantallas sin aumentar el precio final.
Por ahora, lo que ocurrirá es una incógnita, aunque la llegada del XRING O1 no es un rumor a futuro: está a la vuelta de la esquina y promete ser un competidor digno en la gama alta Android.