Hace poco más de una semana conté que había comprado y empezado a usar el nuevo tratamiento de colágeno viral de Mercadona. Tras un análisis de sus ingredientes, expliqué que haría la reseña en un mes, pues es lo que dura un envase completo. Así, podría dar una explicación más completa sobre su eficacia. Sin embargo, hoy vengo a publicar dicha reseña, ya que he dejado de usar el producto y no tenía sentido seguir esperando.

Con esto ya se puede intuir que, al menos en mi caso, el producto no vale la pena. Como ya avisé en esa primera publicación sobre el tratamiento de colágeno viral de Mercadona, parecía que iba a ser muy hidratante. Sus ingredientes se prestan a ello y, además, es lo que notaba nada más usarlo. Sin embargo, con el tiempo no he notado ni siquiera eso.

Quiero dejar claro, por un lado, que no soy dermatóloga. Lo que cuento aquí no es más que mi opinión personal, junto a datos procedentes de búsquedas en la literatura científica y mi experiencia escribiendo sobre estos temas. Por otro lado, es importante tener en cuenta que mi piel es seca y bastante sensible, con brotes puntuales de dermatitis. Cuando se da ese último caso, sigo una rutina específica pautada por un médico en la que, por supuesto, no voy a entrar. Para ese tipo de necesidades de la piel siempre debemos consultar a un profesional.

En esta ocasión mi piel estaba bien, simplemente seca y con necesidad de hidratación. Parecía que el tratamiento de colágeno viral de Mercadona me la podía aportar. Pero no ha sido así precisamente.

Las carencias del tratamiento de colágeno viral de Mercadona

Como ya vimos en el artículo previo a la reseña, el tratamiento de colágeno viral de Mercadona tiene muy buenos ingredientes si lo que buscas es una bomba de hidratación. De hecho, en ese momento lo había usado durante dos días, pero ya había notado que dejaba la piel bastante hidratada, con ese aspecto ligeramente pegajoso que suele dejar el ácido hialurónico hasta que se absorbe por completo. Este, de hecho, es uno de sus ingredientes estrella. Más que el colágeno, en realidad.

El problema es que esa hidratación, al menos en mi caso, no ha sido duradera. Mercadona indica que el producto puede usarse tanto durante el día como durante la noche. Yo elegí la de noche.

En mi experiencia personal, me funciona mucho más una rutina minimalista, por lo que opté por, durante el tiempo que probara este producto, no usar nada más que eso y un contorno de ojos en la rutina de noche. Después de limpiar la piel, por supuesto. Así, por un lado, no cargaría la piel de productos y, por otro, podría ver mucho mejor sus resultados, con seguridad de que no se debían a algún otro componente. 

Claramente, esta no ha sido suficiente hidratación, ya que por la mañana mi piel estaba muy seca. Eso se solucionaba con la rutina de mañana, no tendría que haber problema. Pero en realidad sí lo había, ya que con el paso de los días mi piel se empezaba a ver mucho más seca de lo normal, incluso rugosa al tacto. 

tratamiento de colágeno viral de Mercadonatratamiento de colágeno viral de Mercadona
Tratamiento viral de Mercadona

Cada caso es diferente

Por todos estos motivos, he decidido dejar de usar el tratamiento de colágeno viral de Mercadona después de 10 días de uso. Han sido suficientes para saber que no es para mí. Quizás debería haber esperado el mes completo para saber si realmente produce ese efecto tensor que promete. Pero para que una piel se vea tersa el primer paso es que esté hidratada y en mi caso no lo estaba consiguiendo.

Puede que este producto le vaya genial a otras personas. De hecho, como ya señalé, los ingredientes son bastante buenos. En mi caso no han sido suficientes y no podía dejar de decirlo en una reseña sincera. Ahora bien, hay algo que sí debe quedar claro y es que si buscas reforzar tu piel con más colágeno, esta no es la mejor opción. Recordemos que su peso molecular es demasiado elevado para atravesar la barrera cutánea. La abrasión del aplicador no es suficiente si queremos un efecto eficaz. Por eso, si nuestro principal objetivo es ese, podemos optar por productos que promuevan la síntesis de colágeno desde nuestras células. Un buen ejemplo de ello es el del retinol y otros retinoides. Es cierto que sensibilizan un poco la piel al principio, pero incluso en pieles delicadas como las mías pueden funcionar si se usan en concentraciones bajas y con un inicio paulatino.

De todos modos, como siempre, ante la duda, consulta a un profesional de la dermatología con tu caso concreto. Nadie mejor para decirte cuál es la mejor rutina para tu piel. 

Ver fuente