Llevo años siendo un fiel usuario de un iPad; es mi café por las mañanas, mi bufanda los días de invierno y mi sombra en verano, pero lleva dos semanas metido en el cajón de mi mesita de noche de mi escritorio. Lo he dejado ahí para probar la que promete ser una de las mejores alternativas a las tablets de Apple: la Xiaomi Pad 7 Pro. Dos semanas después, tengo muchas cosas que contar.
Siendo sinceros, tomar la decisión de dejar de usar mi iPad a cambio de esta Xiaomi Pad 7 Pro no ha sido difícil, sobre todo teniendo en cuenta las prestaciones de la tablet de Xiaomi. El dispositivo cuenta con características muy parecidas a los modelos de Apple. Tiene una pantalla de 11,2 pulgadas, un procesador potente, almacenamiento interno suficiente, un sistema de cuatro altavoces estéreo y está construida en aluminio. Y su aspecto, de hecho, recuerda mucho al de las tablets de Apple.
Curiosamente, la Xiaomi Pad 7 Pro es un híbrido de diferentes modelos de iPad. Tiene el aspecto y los colores de un iPad base, la pantalla y la potencia de un iPad Pro y un iPad Air, y el precio, también de un iPad base: cuesta solo 500 euros.
Todo ello me hizo pensar en que apenas notaría diferencia más allá del sistema operativo, pues la tablet de Xiaomi tiene Android, y el iPad, claramente, incluye iPadOS. Pero lo cierto es que hay muchos más cambios de los que se ven a simple vista y que han hecho olvidarme de mi tablet.
¿Pero esto es…?


Cuando digo mucho que la Xiaomi Pad 7 Pro recuerda mucho al iPad, no exagero. De hecho, no hay persona que no haya visto la tablet que pensara que era un iPad; sobre todo si esta está acoplada a la funda teclado que Xiaomi vende por separado.
El dispositivo en sí tiene un cuerpo completamente de aluminio, toda la trasera es de este mismo material, a excepción del módulo fotográfico, que para sorpresa de nadie también se parece al del iPad, aunque en este caso es de cristal. Los marcos, por supuesto, también son de metal, y son completamente planos.
El frontal también es muy parecido al iPad. No solo por sus marcos mínimos o por su relación de aspecto —que es la característica en una tablet— sino por su tamaño de pantalla. En concreto, la Xiaomi Pad 7 Pro cuenta con un panel bautizado como crystal-clear de 11,2 pulgadas. Se trata de una pantalla con una resolución de 3,2 K (unos 3200 x 2136 píxeles) y cuenta, además, con una tasa de refresco de 120 Hz, así como con un brillo de 800 nits.


Es, sin duda, una de las mejores pantallas que podemos encontrar en una tablet. Es muy nítida, tiene unos ángulos de visión excelentes y una interpretación de los colores extremadamente buena. Su brillo, además, es más que suficiente para poder ver contenido multimedia, incluso en exteriores —siempre y cuando, eso sí, no dé el sol directo—.
La tasa de refresco de 144 Hz, además, hace que la experiencia de uso sea considerablemente mayor, aunque es cierto que no siempre funciona a velocidades tan altas. No obstante, y teniendo en cuenta que ningún iPad por debajo de los 1000 euros incluye esta característica, es un punto muy a tener en cuenta.
Por cierto, la pantalla se complementa con un sonido estéreo compuesto por cuatro altavoces que es muy, muy bueno, u hace que la experiencia a la hora de ver contenido multimedia sea mucho más placentera. No miento si digo que, incluso, he disfrutado más viendo contenido multimedia con este tablet que con mi iPad.
HyperOS hace un muy buen trabajo en la Xiaomi Pad 7 Pro


Si bien el uso que le doy a mi iPad es mayoritariamente multimedia, en muchos casos opto por realizar algunas tareas más enfocadas a la productividad. Apple, en este aspecto, no tiene rival, y aunque sí que es cierto que en muchas tablets existe un modo PC más avanzado, la mayoría de apps del iPad están perfectamente adaptadas para usar con facilidad. Pues bien, la experiencia de uso de HyperOS es muy, muy parecida a la de iPadOS.
En parte, porque inevitablemente HyperOS tiene una interfaz muy parecida a la del iPad: un dock principal translúcido, animaciones muy fluidas, colores claros, iconos minimalistas… No es algo realmente malo. De hecho, agradezco que Xiaomi también tenga esa atención en los detalles. He de decir, además, que HyperOS tiene alguna que otra función adicional —sobre todo en cuanto a personalización— que iPadOS no tiene y que es muy bienvenida.
Una de las cosas que más me han gustado de la interfaz de la Xiaomi Pad 7 Pro, son las opciones de ventanas flotantes y pantalla dividida. De nuevo, funcionan de manera similar a iPadOS: simplemente arrastrando el icono desde el dock a la pantalla para abrir una ventana flotante, o desplazando la app a una esquina para activar la pantalla dividida, y en ambos casos es bastante intuitivo; todo con una fluidez extrema y sin fallos. Las apps, además, se adaptan a la perfección al tamaño de la ventana.
En cualquier caso, HyperOS también ofrece un modo de «estación de trabajo» en el que es posible abrir múltiples ventanas flotantes pulsando en los iconos del Dock. Puede ser útil en los casos en los que se requiere mucha multitarea, pero no es algo que vaya a usar durante mucho tiempo.


La Xiaomi Pad 7 Pro también cuenta con prestaciones de IA. Integra Gemini como asistente, así como la función ‘Circle to Search’, además de Xiaomi, como diferentes herramientas de escritura, edición de fotos, etc.
Por cierto, la tablet está equipada con un procesador Snapdragon 8s Gen 3 que, junto a sus 8 o 12 GB de RAM, ofrecen un rendimiento más que decente para el día a día. También es más que suficiente su batería de 8.850 mAh si no se le da un uso demasiado exigente. Además es compatible con una carga rápida de 67W. Eso sí, no incluye cargador en la caja.
Otra cosa: para mejorar la productividad, Xiaomi vende por separado una funda con teclado que —sorpresa— es muy parecida a la del iPad. Lo cierto es que funciona muy bien; las teclas tienen un buen recorrido y el trackpad es muy suave y de un tamaño más que suficiente para navegar por la interfaz sin problemas. También podemos adquirir un lápiz con el que escribir y dibujar en la tablet y el cual es muy preciso.
¿Merece la pena la Xiaomi Pad 7 Pro?
A lo largo del análisis he dejado claro las tres cosas de la Xiaomi Pad 7 Pro que me han hecho olvidarme de mi iPad. Pero, por si acaso, aquí te hago un resumen.
Su pantalla es, sin duda, lo mejor de lo mejor: brillante, con una muy buena interpretación de los colores, extremadamente fluida y con compatibilidad con diferentes tecnologías que elevan considerablemente la experiencia a la hora de ver contenido multimedia.
HyperOS es lo que le hace falta a las tablets Android: es bonito, funcional y ofrece funciones adicionales muy útiles. Lo he comentado anteriormente: su parecido a iPadOS no es un inconveniente; es más, lo agradezco.
Los accesorios son el mejor complemento de la Xiaomi Pad 7 Pro: una funda teclado bonita, bien fabricada y con unas teclas con muy buen recorrido. El Xiaomi Focus Pen, aunque no me resulta tan útil como el teclado, también funciona a las mil maravillas. Eso sí, es importante tener en cuenta que tienes que pagar 200 euros y 100 euros, respectivamente, para tenerlos.
Ahora bien, ¿merece la pena la Xiaomi Pad 7 Pro? Me atrevería a decir que, por lo que cuesta (499 euros) no hay una opción mejor dentro del panorama Android ni que tenga una pantalla buena. Por tanto, si buscas una alternativa al iPad de Apple, esta es, sin duda, la mejor opción. Eso sí, ten en cuenta que la experiencia de uso incrementa considerablemente con la funda teclado, por lo que, en realidad, el precio total de la tablet se situaría en los 699 euros; aun así, en mi opinión, sigue siendo una opción a tener en cuenta.