La cultura China se remonta a miles de años en el pasado. Sus primeros registros escritos datan de 5.000 años atrás. Por eso ostenta una riqueza sin igual en todas las artes. Hasta el punto de que, como sucede con otras civilizaciones legendarias, existen muchas personas que dedican sus vidas solamente a estudiar sus productos culturales. Black Myth: Wukong evidencia el enorme potencial con el que cuenta la cultura china para llamar la atención del mundo.
El videojuego acaba de tener una de las salidas al mercado más exitosas de toda la historia, logrando vender diez millones de copias es solo tres días. Superando a grandes éxitos como Elden Ring y Hogwarts Legacy. Game Science, la empresa de Shenzhen responsable por Black Myth: Wukong, invirtió 100 millones de dólares en el trascurso de seis años para producir el juego y vaya que ese dinero ha dado frutos. A una semana de su lanzamiento, su inversión se ha cuadruplicado.
Entre muchos factores, el enorme éxito de Black Myth: Wukong se debe a la fascinante representación que hace de la novela china más famosa de todos los tiempos, Viaje al oeste. Los desarrolladores quisieron traer el épico relato al siglo XXI, construyendo una experiencia novedosa que te lleva de viaje por toda China, mientras acabas con los demonios que buscan cortarte el paso. La historia detrás del juego no puede ser más interesante.


Black Myth: Wukong y Viaje al oeste
Viaje al oeste es la novela china más famosa que se ha escrito. Un clásico inigualable que ostenta decenas de adaptaciones. Está basada en la impresionante historia real de Xuanzang, un monje chino quien en el año 629, a la edad de 27 años, decidió viajar a la India para obtener los sutras budistas originales, los textos fundamentales de la religión. Le preocupaba que las versiones con las que contaban los budistas chinos como él estaban incompletas o incluso mal traducidas. Por eso decidió pasar diecisiete años recorriendo miles de kilómetros en busca de la iluminación tanto para él como para sus compatriotas.
Casi mil años después de la épica excursión que cambiaría la historia de la región para siempre, el legendario escritor Wu Cheng’en decidió escribir una novela en la cual mitificaría los acontecimientos reales. En Viaje al oeste, el mismísimo Buda es el que tiene la idea de enviar a alguien a la India para recolectar los sutras originales y llevarlos a China. El monje Tang Sanzang se convierte en el elegido y para protegerlo el Buda le provee de tres deidades acompañantes, las cuales se han comportado como no debían y servir de guardaespaldas será la manera en la que saldarán su deuda. Entre estas está Sun Wukong, más conocido como el Rey Mono, la novela lo convirtió en una de las figuras más icónicas de la cultura china.
Los primeros siete capítulos del libro (cuenta con cien capítulos o 2.300 páginas) se enfocan en presentar al personaje de Sun Wukong. Nacido de una piedra nutrida por los cinco elementos, el Rey Mono se convierte en un experto en el taoísmo, lo que le permite cambiar de forma, derrotar a cualquier enemigo en combate y hasta alcanzar la inmortalidad. Es un personaje irreverente e ingenioso, con un gusto por el sarcasmo y una osadía que suele meterlo en problemas. Sus problemas crecen tanto que se vuelve capaz de retar a todos los dioses que yacen en los cielos. El único capaz de vencerlo fue el Buda, quien lo condenó a pasar 500 años encerrado bajo una montaña, luego le otorga una oportunidad de redimirse escoltando a Tang Sanzang.


La historia de Black Myth: Wukong comienza justo después de que Sun Wukong ha tenido éxito en su misión de redención, habiendo logrado alcanzar la budeidad, la condición de vida de mayor nobleza que un ser vivo puede manifestar. A pesar de esto ha rechazado vivir en la corte celestial con las demás deidades, prefiriendo la paz de su montaña. Los dioses, sintiéndose irrespetados, envían por él a un ejército celestial, así logran vencerlo y encerrarlo de nuevo bajo la montaña. Sin embargo, antes de ser derrotado, Wukong logró dividir sus poderes en seis reliquias, quien las recupere podrá despertar al Rey Mono.
Un fenómeno cultural sin precedentes
El grandioso éxito de Black Myth: Wukong se debe principalmente a la pasión que ha motivado en el público chino. El mercado de videojuegos de China es el más grande del mundo, con ventas superando los cuarenta y dos millardos de dólares. Una enorme proporción de ese dinero suele ir dirigido a juegos para celular o a juegos gratis de battle royale cuyo modelo de negocio se sostiene en las microtransacciones. Black Myth: Wukong representa una excepción a la regla.
Mientras que múltiples compañías han dado días libres a sus empleados para que jueguen Black Myth: Wukong, algunas han ido más allá, acompañando los días libres con versiones digitales de lujo del juego. El fenómeno también ha tenido efecto en la industria del turismo, especialmente en la provincia de Shanxi, hogar de 27 de los 36 sitios históricos chinos que aparecen en el juego. En su día de lanzamiento, la búsqueda del término “Shanxi turismo” se duplicó en comparación con niveles normales. Sin perder el tiempo, el Departamento de cultura y turismo de Shanxi publicó un video en redes sociales mezclando imágenes del juego con videos de sus atracciones turísticas.


La cultura china contemporánea deja mucho que desear. En comparación con eras anteriores, la producción artística del país asiático es minúscula. Ampliamente superada por su vecino Corea del Sur, una nación que cuenta con menos del 5% de la población china. Esto se debe tanto a la estricta censura ejercida por el gobierno, como a la catastrófica Revolución Cultural China, evento que acabó con los prospectos artísticos del país por varias generaciones. El éxito de Black Myth: Wukong es un paso en la dirección correcta, a consolidar un estatus cultural respetable a nivel mundial.