En 1896, el cine todavía era una atracción de feria de la que no se sabía demasiado. Por lo que cuando el inventor y fotógrafo William Heise, captó una breve secuencia que mostraba a una pareja besándose, causó furor y horror. No solo por sorprender a la moralista sociedad norteamericana de la época, sino por demostrar, a la vez, algo en apariencia sencillo. El amor también podía captarse en cámara. O al menos, formar parte del floreciente mundo cinematográfico y sus historias. Ocupar, sin duda, un lugar de importancia en la manera en el que recién nacido séptimo arte se concebía a sí mismo. 

Un siglo y un poco después, el romance ha cumplido esa promesa para convertirse en uno de los géneros más populares del mundo cinematográfico. De grandes historias que conquistan a varias generaciones, a pequeñas joyas que meditan sobre el desamor, la angustia y el paso del tiempo. Lo cierto es que el romance cinematográfico es, en la actualidad, mucho más que la fórmula de chico-conoce-a-chica. Es tanto una exploración sobre la forma en que el amor puede expresarse en una época cínica, hasta la forma de esperanza en que puede convertirse. Una combinación que no solo ha hecho al romance tan querido. A la vez, una forma de entender el paso del tiempo en el mundo del cine.

Para demostrarlo, te dejamos diez películas románticas para llorar y te decimos dónde verlas. De un amor trágico sobre el escenario hasta un clásico convertido en punto de unión para los románticos del mundo. Lo cierto es que se trata de una celebración sensible y hermosa a la manera en que el amor puede expresar lo mejor del ser humano. Su punto de mayor interés y asimismo, de mayor fuerza, en el recorrido de lo que el género desea — y puede — expresar. 

Eres tú (Netflix)

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¿Te gusta el romance con un tinte fantástico? Esta película de 2023 dirigida por Alauda Ruiz de Azúa es para ti. Javier (Álvaro Cervantes) era un adolescente cuando descubrió el más extraño de los dones. Conocer el futuro romántico de cualquiera a través de un beso. Pero lo que parecía una rareza, terminó por volverse una condena, cuando descubrió que era casi imposible tuviera una relación con cualquiera. Mucho peor aún, que cada gesto de amor en su vida, era también una predicción, la mayoría de las veces complicada.

Que es justo lo que ocurrirá cuando bese a Lucia (Silvia Alonso), la novia de su mejor amigo. El amor se volverá no solo un predicamento, sino además un escenario complicado que deberá recorrer para amar con tranquilidad. O al menos, no en medio de la posibilidad de saber que el porvenir le condena al fracaso amoroso. La cinta ideal para los que creen en el amor y quieren echar alguna lagrimita en un final redondo.

Ha nacido una estrella (Max) 

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Pero, si amas el drama y el de alto calibre, Max tiene la opción que amarás disfrutar. Se trata del más reciente remake de Ha nacido una estrella. Protagonizado y dirigida por Bradley Cooper junto con la mismísima Lady Gaga, la cinta es esencialmente la misma historia de la recordada que versión de 1976. A saber, Jackson (Cooper), es un cantante en horas bajas que descubre el prodigioso talento de Ally (Gaga) y se decide a llevarla al éxito. 

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