La hialuronidasa en medicina estética permite corregir excesos de ácido hialurónico, tratar complicaciones y revertir rellenos de forma segura.
En medicina estética hay algo que todos deseamos: resultados bonitos, seguros y que nos hagan sentir cómodos con nuestra imagen. Sin embargo, no siempre los tratamientos salen exactamente como esperamos. Puede que un relleno con ácido hialurónico dé demasiado volumen, que el producto se desplace o, en casos más serios, que surjan complicaciones como una obstrucción vascular.
Y aquí aparece un recurso que muchos pacientes no conocen, pero muy valioso para quien trabaja con ácido hialurónico reticulado: la hialuronidasa.
¿Qué es exactamente la hialuronidasa?
La hialuronidasa es una enzima, una sustancia que actúa como “tijera biológica”. Su función es sencilla pero muy potente: rompe las cadenas de ácido hialurónico, un componente presente de manera natural en nuestro organismo y que, en medicina estética, utilizamos como material de relleno para hidratar, dar soporte y mejorar volúmenes faciales.
Cuando se inyecta hialuronidasa, ese ácido hialurónico que habíamos colocado se degrada más rápido y el cuerpo lo reabsorbe con facilidad. En otras palabras, la hialuronidasa nos da la posibilidad de corregir, ajustar o incluso revertirun tratamiento con relleno.
¿Para qué se usa en estética?
Lo más habitual es recurrir a la hialuronidasa en estas situaciones:
- Corregir un exceso de volumen: por ejemplo, unos labios demasiado grandes o poco naturales.
- Eliminar irregularidades: como pequeños bultos o asimetrías tras un relleno.
- Tratar complicaciones más serias: cuando el producto presiona o bloquea un vaso sanguíneo y puede comprometer la circulación de la zona.
- Revertir el tratamiento antes de tiempo: hay personas que, simplemente, deciden que no están a gusto con el resultado y prefieren volver a su aspecto previo.
Pongamos un ejemplo sencillo: imagina que te haces un relleno en los pómulos y notas que el volumen es mayor de lo que esperabas. En lugar de esperar meses a que el ácido hialurónico se degrade solo, tu médico puede aplicar hialuronidasa y conseguir que el exceso desaparezca en cuestión de horas o días.
¿Cuándo está indicada?
Los médicos solemos recomendarla en varios escenarios:
- Asimetrías evidentes tras un relleno.
- Migración del producto a otra zona (muy típico alrededor de los labios).
- Aparición de nódulos o granulomas.
- Urgencias estéticas y médicas, como la obstrucción vascular.
Es decir, no se trata de un producto para usar de forma rutinaria, sino de una herramienta de precisión para casos concretos.
Si te encuentras en algunos de estos casos y estás considerando el uso de la hialuronidasa, en los Seguros de Salud MAPFRE encontrarás especialistas que te aconsejarán el mejor tratamiento.
Precauciones y seguridad
Y aquí es donde conviene detenerse. La hialuronidasa es muy eficaz, pero su uso requiere mano experta y entorno controlado.
- Prueba de alergia: lo primero es asegurarse de que el paciente no presenta hipersensibilidad. La reacción alérgica, aunque rara, puede ser intensa.
- Dosis calculada al milímetro: no es lo mismo disolver un pequeño bulto en el labio que corregir un exceso de relleno en los pómulos.
- Clínica equipada: ante cualquier reacción inesperada, es fundamental contar con el material y los conocimientos necesarios para actuar de inmediato.
- Profesionales cualificados: la hialuronidasa no es un “truco estético”, sino un procedimiento médico. Por eso, solo debería aplicarla alguien que conozca bien la anatomía facial y sepa manejar complicaciones.
Posibles efectos secundarios y contraindicaciones
Como cualquier intervención, la hialuronidasa puede tener efectos secundarios. Los más comunes son leves: enrojecimiento, inflamación, pequeños hematomas o sensación de escozor. En raras ocasiones puede producir reacciones alérgicas graves, de ahí la importancia de la prueba previa.
Otro detalle que no siempre se comenta: la enzima no distingue entre el ácido hialurónico del relleno y el que ya existe de manera natural en la piel. Eso significa que, si se aplica en exceso, puede dar lugar a una pérdida de volumen mayor de la deseada en la zona tratada.
Respecto a las contraindicaciones, no se recomienda en personas con alergia conocida a este compuesto o a proteínas animales, ni en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, salvo urgencias muy específicas.
Lo que debes saber…
- La hialuronidasa no es un producto milagroso, pero sí es un gran aliado de la seguridad en medicina estética. Nos permite corregir resultados, evitar complicaciones y, sobre todo, ofrecer a los pacientes la tranquilidad de que siempre hay un plan B.
- Si alguna vez te planteas un tratamiento con ácido hialurónico y te preocupa qué pasaría si no quedas satisfecho, recuerda que la hialuronidasa existe. Eso sí: debe aplicarse con cuidado, en manos de médicos expertos y en un entorno adecuado.
- Porque al final, la estética no va solo de mejorar la apariencia, sino también de cuidar la salud y la confianza de quienes deciden dar el paso.
Referencias
- “The Use of Hyaluronidase in Aesthetic Practice: A Comparative Study of Practitioner Usage in Elective and Emergency Situations” (2024), Aesthetic Surgery Journal.