Ejemplos y guías para elegir plazo de hipoteca
Para visualizar mejor la diferencia entre un plazo de hipoteca a 20 y 30 años, no hay nada mejor que hacer una simulación con números concretos. Para ello, imaginemos que el banco te presta 160.000 € al 3 % TIN fijo (Tipo de Interés Nominal). Usando un simulador hipotecario, obtenemos aproximadamente:
- Hipoteca a 20 años: obtendrías una cuota mensual alrededor de 880 € y unos 53.000 € de intereses generados durante esos 20 años.
- Hipoteca a 30 años: tu cuota mensual saldría alrededor de 670 € y unos 83.000 € en total pagados en intereses.
En este caso, la diferencia de cuota es de unos 210 € menos al mes con la hipoteca a 30 años, que, de entrada, suena muy bien si lo miramos desde el punto de vista mensual. Pero la contrapartida es que acabarías pagando 20.000 € más en intereses al alargar el plazo.
Expertos calculan que, para una hipoteca media, añadir 10 años de plazo (de 20 a 30, por ejemplo) baja la cuota mensual en unos 100-150 €, pero suma alrededor de 20.000 € en intereses adicionales. En hipotecas más elevadas, cada década extra puede ahorrarte al mes entre 300 y 400 €, pero cada 10 años añadidos al plazo nos cuestan cerca de 40.000 € más en intereses totales.
Tip financiero:
Si ya tienes una hipoteca a largo plazo, una estrategia para no pagar tantos intereses es amortizar anticipadamente reduciendo el plazo. Muchos españoles, en cuanto reúnen algo de ahorro extra, optan por recortar años de su hipoteca en vez de bajar la cuota, ya que así se ahorran más intereses. Eso sí, asegúrate de revisar las posibles comisiones de amortización anticipada.