A un día de que finalice el soporte oficial para Windows 10, algunos usuarios ya evalúan si actualizan a Windows 11 o se quedan donde están. Si bien cientos de millones de ordenadores no son compatibles, existe un porcentaje considerable que sí permite instalar la versión más reciente del sistema operativo. No obstante, Microsoft se las ha ingeniado para romper la herramienta de instalación de Windows 11 en el momento menos oportuno.
Microsoft confirmó que la herramienta de creación de medios está «rota» y no funciona en algunos equipos con Windows 10. Esta utilidad, también conocida como MCT (Media Creation Tool), permite crear una USB de arranque con la última versión de Windows 11 para realizar una instalación limpia. La herramienta descarga el ISO y configura tu dispositivo extraíble para instalar o recuperar Windows.
En una actualización de su web de soporte, Microsoft revela que la última actualización de la herramienta de creación de medios tiene un fallo:
«Es posible que la versión 26100.6584 de la herramienta de creación de medios de Windows 11, publicada el 29 de septiembre de 2025, no funcione como se esperaba cuando se usa en dispositivos Windows 10. La herramienta de creación de medios podría cerrarse inesperadamente, sin mostrar ningún mensaje de error.»


El problema se presenta en los ordenadores con Windows 10H2, la última versión estable del sistema operativo. Microsoft señaló que ya trabajan en una solución para resolver este inconveniente y se lanzará a través de un parche por separado. La única alternativa en este momento es descargar el ISO de Windows 11 a través de la web oficial.
El fallo impide cargar Windows 11 en una USB para una instalación limpia
El fallo de la herramienta de creación de medios llega en el peor momento. Tras meses de montar una campaña agresiva para invitarnos a actualizar a Windows 11, Microsoft no se percató de que era imposible hacerlo a través de esta popular utilidad. Esto deja a los usuarios con dos opciones: descargar el asistente de instalación o bajar el ISO y usar una herramienta como Rufus para una instalación limpia.
La primera opción es la más sencilla para el usuario común, puesto que mantiene sus documentos y programas instalados sin cambios. Solo es necesario comprobar la compatibilidad del equipo antes y dejar que el asistente haga todo el trabajo. Aunque esto suena ideal, también puede acarrear errores previos y presentar problemas debido a configuraciones antiguas.


La instalación limpia de Windows 11 suele ser preferible cuando se busca el máximo rendimiento y estabilidad. Al hacerlo sobre una partición limpia, reducimos el riesgo de conflictos entre controladores, archivos residuales o configuraciones heredadas. El único punto en contra es que tendremos que reinstalar programas, reconfigurar dispositivos y cargar nuestro respaldo de documentos.
Aunque Microsoft ofrece la opción de bajarte el ISO, la web también presenta problemas y no permite hacerlo. Al tiempo de redactar esta noticia, la página se queda pegada al presionar el botón de descarga y muestra el mensaje: «Se produjo un problema al procesar la solicitud. Inténtalo nuevamente más tarde».


Lo mejor es esperar un tiempo a que Microsoft resuelva los errores antes de considerar una instalación de Windows 11. Recuerda que, aunque el soporte de Windows 10 finaliza el 14 de octubre de 2025, todavía tienes opción de extender las actualizaciones por un año más y gratis.