Que Apple realizó el martes uno de los eventos más interesantes, completos y revolucionarios de los últimos años es algo que ha calado en la industria. Los iPhone 17 son dispositivos que llegan con novedades bien implementadas y coherentes, aunque hay cosas que no sabes. La californiana no mencionó varias funciones nuevas durante la presentación, siendo una de ellas la más importante que ha llegado al iPhone para mejorar su seguridad. Hablamos de Memory Integrity Enforcement (IME).
Apple ha decidido que es hora de mejorar la seguridad de sus móviles, y ha estrenado este sistema que engloba un gran trabajo compartido entre el equipo de software y hardware de la compañía. Lleva trabajando en él desde 2020, y es en esta generación del iPhone 17 cuando ha podido ponerla en marcha e integrarla al completo en los dispositivos.
Memory Integrity Enforcement es una nueva barrera contra ataques malintencionados, un nuevo cortafuegos que tienen todos los iPhone 17 y que se centra en la memoria del dispositivo. Según Apple, este elemento es el más vulnerable en los equipos actuales, e históricamente es el que más ataques exitosos recibe. No solo en el iPhone, sino en todos los móviles del planeta.
Por su arquitectura y sistema de paquetes, la memoria es mucho más fácil de atacar que otros sistemas. Los paquetes en constante movimiento pueden ser atacados y debilitados hasta encontrar una puerta abierta (vulnerabilidad) con la que acabar teniendo el control del sistema. Pues bien, los iPhone 17 van a ponerle las cosas más difíciles a todos los hackers.


Memory Integrity Enforcement, la nueva joya para mejorar la seguridad de los iPhone 17
Por si te lo estás preguntando, este nuevo sistema no solo llega al modelo base. Está presente en todos los nuevos modelos: iPhone 17, iPhone Air, iPhone 17 Pro y iPhone 17 Pro Max. ¿Y el resto de móviles del catálogo? No lo van a recibir con una actualización, pues parte de la magia de IME está en una integración total con el hardware. En este caso, el nuevo chip A19 y A19 Pro.
Con IME, Apple ha elevado drásticamente la dificultad a la hora de atacar un iPhone 17 intentando corromper los paquetes de memoria que se envían constantemente entre apps y las diferentes partes del sistema. Tiene varias capas complejas, pero aquí va un resumen de lo que ocurre en los iPhone con Memory Integrity Enforcement.
- Asignadores de memoria tipados. Este sistema es parte del software del dispositivo, y trata de organizar los datos por tipos. Los diferencia y los pone en «filas» diferenciadas, para que si hay algún tipo de paquete corrupto, sea mucho más sencillo de identificar. Es una de las primeras capas, por lo que si se detecta algo extraño en este proceso se «ahoga» el ataque y se vuelve mucho más complicado.
- Enhanced Memory Tagging Extension (EMTE). Aquí entra en juego el hardware de los iPhone 17. EMTE tiene como objetivo asignar una etiqueta secreta a cada bloque de paquetes de la memoria, asegurándose de que el receptor de ese paquete es capaz de validar esa misma etiqueta para «dejar pasar» la información. Algo así como una doble llave para mejorar la seguridad.


¿Qué es lo mejor de este nuevo sistema? Que Apple lo ha diseñado para que trabaje de forma constante. No se ejecuta solo en algunos procesos o con ciertas aplicaciones: siempre está funcionando, validando paquetes y en constante alerta para evitar que nada se cuele. De ahí que la compañía haya tardado 5 años en poder implementarlo.
IME se ha desarrollado con el objetivo de mejorar la seguridad sin comprometer el rendimiento o la autonomía, por lo que Apple ha destinado varios procesos continuos del chip A19 y A19 Pro, haciendo que este proceso pueda ejecutarse sin reducir la potencia o hacer que la batería dure menos de lo normal. De ahí, también, que solo los nuevos iPhone 17 sean capaces de tener este sistema y no se pueda llevar de forma óptima a otros modelos.
A modo de resumen, aunque el tratamiento de los paquetes y la memoria es algo complejo, debes quedarte con lo básico: Apple ha mejorado sustancialmente la seguridad de la parte más vulnerable del sistema, haciendo que los ataques a los iPhone 17 ahora sean mucho más complejos.
De hecho, se cree que el software espía Pegasus necesitará un buen tiempo hasta poder acceder a los nuevos iPhone 17, pues su sistema de entrada a los dispositivos es justo la puerta que acaba de cerrar Apple a cal y canto: la memoria.